Un vino blanco lleno de dulzura
Con un 85% de uvas Torrontés y un 15% de Riesling, el Amayala Blanco Dulce de Corte es la última novedad de la bodega de Cafayate, Salta, que rinde tributo con sus vinos a su región de origen. Ubicada a 1.800 metros de altura en El Divisadero, tiene tres predios: Finca Las Mercedes, Finca La Brava y Finca Amalaya, cada una con sus diferentes suelos y microclimas. El nuevo producto de Amalaya (en la lengua de los pueblos originarios de la zona significa “esperanza de un milagro”, que parece haberse producido) es un vino fresco y sutilmente dulce, a diferencia de los vinos tardíos, que tienen mayor concentración de azúcar. Es ideal como aperitivo o para acompañar ensaladas, sushi o carnes blancas. El Amalaya Blanco Dulce se suma así a las otras etiquetas de la bodega salteña: Amalaya Gran Corte, Amalaya Tinto, Amalaya Blanco y Amalaya Rosado. El precio de venta al público ronda los $70.