Uno de los postres más sencillos y populares de la cocina italiana, más específicamente de la región del Piamonte, a base de muy pocos ingredientes, la Panna cotta (literalmente, crema cocida) puede comerse sola o con distintos acompañamientos.

Ingredientes (para 6/8 porciones)
1 l de crema de leche
300 g de azúcar
14 g de gelatina sin sabor
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 ralladura de naranja
70 cc de agua

Preparación
Calentar la crema y retirar del fuego antes de que hierva. Volcar en un bol y agregar el azúcar, mezclando con batidor de alambre o con dos tenedores. Añadir la esencia de vainilla y la ralladura de naranja. Reservar. Diluir la gelatina en el agua a baño María. Incorporar una pequeña parte de la mezcla anterior e integrar. Volcarla en la primera preparación. Colocar en moldes individuales o en una budinera forrada con film. Llevar a la heladera por dos horas o hasta que quede bien solidificada.

Presentación
La Panna cotta, como el flan, puede comerse sola, pero por lo general se acompaña con dulces de uno o varios frutos rojos, caramelo líquido o frutas frescas y se adorna con una hoja de menta y/o con chocolate rallado.