Es uno de los postres más sencillos y antiguos de España. Consiste en un bol de una especie de  crema pastelera que se sirve con azúcar quemado por encima que se convierte en una capa de caramelo crocante. Es muy popular tanto en las casas como en los restaurantes, y es tradición comerla cada 19 de marzo, el Día de San José.

Ingredientes (para 6 porciones)

500 cc de leche

4 yemas

20 g de almidón de maíz

100 g de azúcar

1 rama de canela (o una cucharadita de canela en polvo)

1 cucharada de ralladura de limón

1 pizca de sal

Preparación

Poner a hervir la leche con el limón y la canela. Aparte, mezclar el azúcar con el almidón de maíz y las yemas. Incorporar la mitad de la leche y mezclar permanentemente. Luego agregar esta mezcla al resto de la leche y continuar revolviendo. Cocinar a fuego medio hasta que rompa el hervor. Continuar cocinando a fuego bajo hasta que espese. Colocar en boles individuales y dejar enfriar. Inmediatamente antes de servir colocar azúcar por encima y caramelizar con un soplete o utensilio bien caliente (por ejemplo, una cuchara) calentado en la hornalla.

Presentación

Por lo general se la sirve sola, aunque hay quienes le agregan un copo de crema chantilly, helado de crema americana o alguna fruta fresca.