El Blog de los Alfajores
“Hola gente, soy un amante de los alfajores, y después de mucho buscar por la web me doy cuenta de que no existe ninguna página en la que se hable exclusivamente de esta impresionante, genial, única, inimitable, incomparable golosina surgida de los más celestiales pensamientos de inteligencias superiores. Por eso y con toda humildad, decidí iniciar este blog para poder hacer críticas de los distintos alfajores existentes en el mercado argentino y por qué no, en otros mercados como el uruguayo (siempre y cuando tenga la chance de viajar de nuevo para aquellos lares). Obviamente toda opinión acerca de cada marca queda bajo mi absoluta responsabilidad y gusto, pero sin olvidarme de que cualquiera puede poner aquí mismo su punto de vista”. Así se presentaba en sociedad en 2006 El Blog de los Alfajores, un sitio de consulta obligada de los aficionados a la popular golosina, en especial en estos días otoñales, antesala del invierno, obra de un tal Lord Khyron, “alfajómano gamer, diseñador de videojuegos, licenciado en comunicación por formación, enfermo de la música, cinéfilo, amante del comic y el animé... en definitiva un freak”.
Hay reseñas de gran cantidad de alfajores, desde los premium hasta los más ignotos, pasando por los clásicos y los de culto. Hay “reviews” escritas y en video, y en cualquier caso están resueltas con humor y argumentos muchas veces difíciles de refutar. Como ejemplo, la correspondiente al mítico Capitán del Espacio:
“1. Este alfajor posee una galletita blanda bastante agradable con un ligero gustito a cacao amargo, con un gusto que no abusa de los saborizantes artificiales típicos de los alfajores de segunda línea, lo cual es de agradecer.
2. El relleno es uno de sus puntos débiles: la cantidad de dulce de leche es escasa, lo cual hace que pierda puntos frente a otros alfajores que poseen cantidades mayores.
3. El segundo punto crucial tiene que ver con la cobertura del alfajor: contrariamente a lo que la mayoría de sus fans piensan, el CDE negro no está bañado en chocolate, sino que posee lo que se ha denominado ‘baño de repostería’, mucho más barato y de calidad netamente inferior que el primero, ya que la grasa de cacao es sustituida total o parcialmente por aceites vegetales.
4. Puedo afirmar que cuando uno termina de comer un CDE, la boca no queda grasosa ni pastosa (algo muy común en los alfajores baratos), pero por otro lado, el sabor no persiste por demasiado tiempo.
5. Ciertamente, caen algo pesados.”