Filósofo, docente e investigador en distintos temas de la cultura, la política y los medios de comunicación, Oscar Landi (1939-2003) fue una figura relevante en el campo intelectual argentino y en esa condición participó de la mayor parte de los debates que tuvieron lugar en el país a partir de la década del sesenta en adelante. Formado en la militancia comunista y en la lectura de los textos mayores de la tradición fenomenológica francesa, Landi pensó los grandes problemas de la política argentina evitando los caminos fáciles y las consignas simplificadoras. Pensó la política pensando la subjetividad y la cultura, sobre todo a partir de las enseñanzas que le había dejado el acceso a los textos de Gramsci y Merleau-Ponty, y entendió tal vez mejor que nadie, y muy temprano, el lugar y la importancia de los medios masivos de comunicación en la trama de la vida colectiva de nuestra sociedad.

     El libro del también filósofo y político Eduardo Rinesi, que trabajó con Landi durante una década en su cátedra –en tiempos que él define como muy difíciles para la historia del país y las universidades públicas-, traza, creemos que con mucho éxito, el itinerario de la obra teórica de Landi, que surge del cruce contemporáneo entre la filosofía de las imágenes, la teoría política, los estudios de comunicación y las grandes herencias de los tratados de retórica. Oscar González, que define al libro como “biografía intelectual”, dice que su recorrido proporciona una aguda reconstrucción de las teorías de la cultura que atravesaron medio siglo de discusiones en el medio intelectual argentino y una memoria imprescindible sobre un hombre que quiso entender su época.

     A partir de la formulación como título de una pregunta que Landi usaba a modo de muletilla en sus conversaciones con los amigos, ¿Cómo te puedo decir?, desmontada en sus múltiples implicancias y significados, Rinesi inicia un camino apasionante en la reconfiguración de la producción intelectual de Landi, de su pulso vital y de su aporte a la cultura nacional. Un camino que llenará al lector de disfrute, no solo por la calidad estilística de Rinesi, sino también por la exhaustiva exploración de todas las resonancias que una frase o un pensamiento pueden provocar.