Deportistas sin fecha de vencimiento
En tiempos donde el deporte de alta competencia parece exigir cada vez más esfuerzo, velocidad y energía, y en donde, acaso por ello, se tiende a pensar que la vida útil del atleta se acorta, grandes deportistas demuestran su vigencia en la elite de sus disciplinas pasados los 35 años. Los “viejos”, parece ser, ya no son tan desechables. El tenista suizo Roger Federer y el basquetbolista argentino Emanuel Ginóbili son tal vez en estos días los mejores exponentes de esta tendencia. Pero cuando se mira lo que sucede en otros deportes y a nivel más general se advierte que no se trata solo de los talentos más geniales.
De acuerdo al ránking del ATP Tour de mediados de febrero, había ocho tenistas de 35 años o más entre los 100 primeros, con Federer de 36 a la cabeza. Entre las mujeres ese número baja a tres, pero con Venus Williams de 37 en el 8° lugar. Y si bajamos el corte a 30 años, esas cifras se incrementan notablemente: 41 hombres y 19 mujeres de esa edad o más están en el Top 100. Según un informe del diario español El País publicado el año pasado (https://elpais.com/deportes/2017/07/07/actualidad/1499437762_404235.html), los deportistas treintañeros son mucho más protagonistas en estos años que en décadas pasadas. En Wimbledon 2017, señala el artículo, 6 de los 8 cuartofinalistas habían estado presentes en la misma instancia diez años atrás, mientras que en 2007 solo se repitieron dos jugadores respecto de 1997. El fútbol no se queda atrás: la última final de la Champions League entre el Real Madrid y la Juventus tuvo un promedio de edad de casi 30 años y fue el más alto de la historia. Y los ejemplos se suceden cuando se mira lo que ocurre en otros deportes.
Ginóbili, el pibe de 40
Cuando a mediados de 2017 el basquetbolista más grande que dio la Argentina (¿hace falta decir que se trata de Manu Ginóbili?) decidió continuar una temporada más en la NBA seguramente no imaginaba que esta temporada volvería a ser tan determinante en el juego de San Antonio Spurs. Y es que muchas veces al deportista veterano se lo valora por su experiencia o por lo que puede aportar en el vestuario pero no se le exige tanto desde el juego. Sin embargo, Manu está sorprendiendo a propios y extraños con las estadísticas de esta temporada. El 7 de enero se lució en la derrota por un punto de su equipo frente a Portland Trail Blazers con 26 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias en 27 minutos. Como venía de anotar 21 tantos ante Phoenix Suns, se convirtió en el primer jugador de 40 años o más en anotar 20 o más puntos en dos partidos consecutivos desde Michael Jordan en la campaña 2002-03. Y la marca de 26 puntos con 40 años o más solo la habían logrado Jordan y Kareem Abdul-Jabbar.
Tras aceptar la propuesta de Gregg Popovich, el histórico entrenador de los Spurs (los dirige desde 1996) de continuar un año más, Ginóbili escribió en su columna del diario La Nación: “Siento que tomé una determinación que me permite seguir jugando en el más alto nivel, que es lo que siempre quise hacer. Y además, a una edad en que jamás imaginé que iba a estar activo. Tanto por mi forma de jugar como por los riesgos que tomé en una cancha, como por los kilómetros que tienen mis piernas entre San Antonio y la selección... Por eso, si hace 10 años alguien me decía ´vas a jugar hasta los 40´, le respondía que estaba loco”.
Federer, la leyenda continúa
El otro gran caso de un +35 que hoy está en boca de todos es el de Roger Federer. El 19 de febrero el suizo recuperó después de más de cinco años el primer lugar del ranking ATP y se convirtió con 36 años y 3 meses en el número uno más veterano de la historia, destronando a Andre Agassi, quien había ocupado esa posición en 2003 y a los 33 años. La primera vez que Roger había alcanzado la cima fue a los 22 años, en febrero de 2004, es decir hace exactamente 14 años. Suma en total 303 semanas como el mejor tenista del mundo.
Tras un 2016 en que lo dominaron las lesiones, operación en la rodilla incluida, Federer declaró que haber parado nueve meses fue como un reset. “No podía mirarme en el espejo y seguir diciéndome: ´El objetivo debe ser ganar todos los Grand Slam y recuperar el número uno´. Estaba con muletas y mi actitud pasó a ser: ´Si puedo volver, me doy por contento´”. Y vaya si volvió.
¿Cuál es el secreto de Federer? En el libro Mente Deportiva, Marcial Pérez recuerda que el mismo Roger contó en una conferencia de prensa de 2006 que todo empezó a cambiar cuando consultó a un especialista en el manejo de las emociones. Antes de eso se fastidiaba y rompía raquetas. “Con aprendizaje y práctica, Roger controló el miedo cuando iba perdiendo, la ira en un error o la preocupación en situaciones de presión”, escribió Pérez. Mark Hodgkinson, autor de Fedegraphica: A Graphic Biography of the Genius of Roger Federer, estudió los números del suizo y reveló que ganó el 65 por ciento de los tiebreaks que disputó en toda su carrera, lo que muestra su capacidad para jugar su mejor tenis cuando está bajo presión. “Mirando los números de la ATP, me llamó la atención ver que el porcentaje de Federer era más alto que el de sus grandes rivales”, dijo.
El expediente Federer tiene muchas fojas. Pérez cita en su libro a Kerry Spackman, quien en La Biblia del ganador ensaya una explicación más neurológica acerca de las habilidades del suizo. “El lóbulo occipital de Federer está cableado de forma distinta al de usted o el mío. En él y no en los músculos es donde residen sus excepcionales habilidades deportivas. La gran diferencia entre Roger Federer y otros deportistas menos hábiles está en su cerebro”, dice Spackman.
La era de los experimentados
Federer y Ginóbili, coinciden todos, son dos “monstruos”. Pero entrenadores y preparadores físicos aseguran que hoy día se ha alargado en general la vida del deportista de elite. “El jugador veterano o experiente tiene varias ventajas sobre el más joven”, dice a Revista Cabal Fernando Gómez, preparador físico e integrante del cuerpo técnico de Omar de Felippe, de reciente paso por Vélez. Y agrega: “Tiene objetivos muy claros. Tiene más conducta, algo que entre los jóvenes es muy difícil de manejar. Tiene la constancia de ir a su casa, una familia armada y ordenada, mejor alimentación y más descanso”. Además, los jugadores más experimentados son dueños de otra virtud que los directores técnicos valoran mucho, y es que resuelven mejor en los momentos de crisis. Por todo eso, hoy es más difícil que un juvenil le quite el puesto a uno que anda por los 30 años o que ya los pasó.
Deportistas jóvenes y experimentados suelen encontrarse en diferentes etapas de la vida. La diversión y las distracciones están más vinculadas más a los de veintipocos que a los que pasaron los 30. Sin embargo, también hay otros factores que explican por qué el promedio de edad de los atletas más destacados ha aumentado. Los preparados físicos saben que hoy cuentan con mucha tecnología para monitorear la preparación de los deportistas y de métodos preventivos para evitar lesiones. “Hace 15 años todos los profes teníamos la premisa de que los jugadores tenían que volar. Estábamos inmersos en la locura del entrenamiento por el entrenamiento. Y para que volaran tenían que correr y hacer un montón de cosas. Hoy, en cambio, queremos que estén fuertes y veloces pero bien. Por eso las tareas son mucho más específicas”, comenta Gómez. De cara a la exigencia de los entrenamientos, los jugadores más grandes tienen además la virtud de ser más comunicativos y contarle al preparador físico cómo se encuentran. “Si están muertos porque el bebé no durmió en toda la noche y ellos tampoco, te lo dicen. No se tiran al precipicio”, remata el ex preparador físico de Olimpo, Quilmes, Independiente y Emelec de Ecuador, además del Fortín de Liniers claro está.
Aunque cada deporte es distinto, los motivos por los cuales los deportistas profesionales están postergando su retiro son más o menos coincidentes. Quienes hurgan un poco más en la historia de la medicina aseguran que tampoco debe pasarse por alto que los atletas de elite de la actualidad nacieron en la década del 80, cuando los medios sanitarios de la mayoría de los países occidentales, y aún de las repúblicas soviéticas, eran muy avanzados. Buenas condiciones de vida en la infancia, dicen, influyen en el rendimiento corporal a largo plazo. Luego, naturalmente, están el talento, la predisposición y las aptitudes de cada deportista. Pero en líneas generales ya no sorprende que a la edad que antes se retiraban muchos estén atravesando una de sus mejores temporadas.
Fotos: web oficial San Antonio Spurs