Fuerte
Después de tres años de silencio discográfico, la banda que lideran Ale Sergi y Juliana Gattas —virtualmente convertida en dúo tras las partidas de Lolo Fuentes, primero, y de Monoto Grimaldi, últimamente— salen al ruedo, o más bien a la pista de baile, con su séptimo álbum de estudio en dieciséis años de vida. Después de su anterior Safari, más cancionístico y acústico, en Fuerte vuelven recargados de electropop, melodías pegadizas y letras de fácil digestión, el estilo que los caracterizó desde un comienzo y que les valió tener público de edades variadas, empezando por los más chicos.
Distintas aproximaciones al amor y al desamor aparecen en el nuevo disco de Miranda!, con doce canciones y producción del gran Cachorro López. En 743, por ejemplo, uno de los temas de difusión, cantan sobre una base funk “Amo la Luna que atraviesa tu persiana/ Dibuja líneas verticales en la cama/ Yo quiero amarte, te quiero hacer feliz/ Quiero llevarte a la Luna y a París” y “Tu amor me está matando la cabeza/ Tu amor me está matando de dolor/ Tu amor me está quemando la cabeza/ Tu amor me está matando de calor”, mientras que en el marchoso Cálido y rojo dicen “El tiempo pasa pero tú ni te alteras/ Que por tu amor estoy sufriendo de veras/ Ya no puedo más/ Hoy no lo resisto más”.
Otra variante es la del tercero en discordia, que muestran en temas como el acústico En esta noche (“Ya no voy a guardármelo más/ Y lo saco para afuera/ No me importa que puedan pensar/ Si tu novio se enoja, qué pena”) o en el más explícito Tu hombre, cantado por Juliana (“Recuerdo cuando me lo presentaste/ Recuerdo que a esa fiesta lo llevaste/ Y desde que lo vi, bailando junto a ti/ Que no puedo pensar en nada más.// Necesito verte, tengo que decirte algo/ Sé que no te va a gustar lo que me está pasando/ No puedo seguir luchando contra lo que siento/ Aunque se me llene el alma de remordimiento.// Creo que me enamoré, amiga, de tu hombre/ Tengo claro que no da, y que no corresponde/ Pero no puedo negarlo ni dejarlo adentro, perdoname/ Se me muere el corazón”). También hay otro, pero de diferente modo, en Tu padre: “Cuando tu padre se enteró/ Se puso a delirar/ Gritaba cosas sin razón/ Fueron al hospital.// Déjalo, está bien así/ (Esto es amor real, tranquilo papá)/ Déjalo, ya elegí”.
Quizá como homenaje, dos grandes del rock nacional aparecen en el disco: Luis Alberto Spinetta en la delicada No (“Todas esas hojas son del viento/ Todos aprendimos la canción/ Pero yo no sueldo aquella historia/ De amor”) y Gustavo Cerati en Enero (“Enero en Buenos Aires/ Quema la ciudad/ Está sonando Deja vu, de Fuerza natural/ Siempre hay una razón para acordarme de vos”). Y como una humorada, o no, en Ahora que soy cantante dicen: “Le dije de bailar/ Le dije de tomar/ Y me decía siempre no. // Y ahora que soy cantante/ Se me aparece por todas partes/ Y ahora que soy cantante/ Me ha convertido en su obsesión.// Me escribe todos los días/ Atormentando con tonterías/ Ahora que soy cantante todo cambió/ Ahora que soy cantante todo cambió”. Lo que no cambió es la vocación y el talento de los Miranda! para hacer más y más hits.
Oscar Finkelstein