Fiestas para recibir al invierno
De Ushuaia a Huacalera. En los extremos del país, en las provincias de Tierra del Fuego y Jujuy, la llegada del invierno, cada 21 de junio, es mucho más que una fecha en el calendario. Separadas entre sí por 4.151 kilómetros de ruta, que pueden recorrerse en 48 horas de manejo ininterrumpido, en ambas localidades (también hay ceremonias en Catamarca, Salta y otras provincias del Noroeste) la celebración del solsticio invernal tiene raíces ancestrales y al mismo tiempo funciona como atractivo turístico. La de Ushuaia se denomina Fiesta Nacional de la Noche Más Larga; la de Huacalera, Fiesta Nacional de Inti Raymi. La oscuridad y el sol, dos maneras de entender el calendario.
En la capital fueguina, la celebración da comienzo antes y termina después de la noche más larga, una tradición que comenzó en los años 70 y que en 1986 fue reconocida como Fiesta Nacional. Este año será del 14 al 24 de junio, con la idea de superar, o al menos igualar, la cifra de 20.000 visitantes que la ciudad recibió el año pasado. Para esta edición, la número 40, habrá nuevamente noches musicales temáticas (folklore, latina, rock, electrónica, tango), con la participación de artistas como Banda XXI, el Chaqueño Palavecino, Los Palmeras, Soledad, Los Huayras, Peteco Carabajal y Bersuit Vergarabat, entre otros. También se elegirán a la Embajadora y al Embajador de Ushuaia, como año tras año en la noche inaugural, entre candidatos y candidatas que representen “valores de solidaridad, entrega, compromiso y trabajo colectivo en beneficio general de la comunidad”, que deben ser postulados por otra persona o institución y sometidos a votación en las redes sociales. Esta figura, a instancias de la Secretaría de la Mujer local, reemplaza desde al año 2016 a la habitual elección de la reina de belleza.
Durante la noche del solsticio, en los inicios del 21 de junio (cuando la luz diurna solo se hace presente aproximadamente entre las 10 y las 17), se realiza una gran fogata, que da luz, calor y color a una vigilia durante la cual los visitantes y los locales, a pesar de las muy bajas temperaturas que suelen darse en esta época del año, recorren museos, centros culturales, polideportivos, bares, restaurantes, discotecas y otros sitios, que permanecen abiertos durante toda la noche. La celebración tiene como objetivo establecer lazos comunitarios y atraer turistas, y representa el comienzo oficial de la temporada invernal, uno de los momentos de gran convocatoria turística de la ciudad, que de todos modos concita la atención de argentinos y extranjeros durante todo el año.
Las actuaciones se realizan en el Polideportivo Lasserre, mientras que en torno a la Bahía Encerrada se llevan a cabo la Marcha de las Antorchas y el show de fuegos artificiales que iluminan la ciudad de Ushuaia y el Canal de Beagle. Otra actividad que se cumple año tras año es el ritual de la quema de los obstáculos o impedimentos. Consiste en escribir las causas que impidieron cumplir objetivos programados para el último año, y luego arrojar el papel a la gran fogata que preside la celebración. También se presentan trabajos de escultura en hielo y nieve, espectáculos teatrales, muestras pictóricas y gastronómicas, patinaje sobre hielo y otras actividades.
La fiesta del sol
El Inti Raymi, por su nombre en quechua, es la celebración que hacen los pueblos andinos desde hace milenios para dar la bienvenida al sol, después de producirse su mayor alejamiento de la Tierra. La fecha también es considerada como la que inicia el llamado año andino, elegida porque es cuando arranca el proceso agrícola anual. Este 21 de junio da comienzo el año 5526, según la tradición incaica y de otros pueblos de la región.
La celebración tiene un hondo contenido espiritual, ya que los pueblos andinos consideran al sol, con su energía sagrada, no como un dios sino como un padre que vela por sus hijos. Por tratarse de una ceremonia ancestral común a muchos pueblos del Noroeste argentino y de otros países cuya geografía está atravesada por los Andes, se suceden una serie de actos y rituales en todos estos lugares. En la Argentina, los lugares más visitados son Huacalera, que es por donde atraviesa el Trópico de Capricornio, y el Pucará de Tilcara, en Jujuy; la ciudad de Salta, y el Sitio Arqueológico Fuerte Quemado, ubicado en Santa María, provincia de Catamarca, entre otros.
La tradición antecede incluso al imperio incaico. El nuevo acercamiento del sol a la Tierra era aguardado con la esperanza de un tiempo mejor para la economía y para las personas, que le otorgaron desde un comienzo un fuerte contenido místico. Ya con los incas en su esplendor, la gran ceremonia del Inti Raymi se concentró en la ciudad de Cusco, Perú, donde todos los 24 de junio la fiesta, que congrega multitudes, se realiza en los escenarios del Templo del Qorikancha, la Plaza de Armas y la Explanada de Sacsayhuamán.
En Huacalera la celebración comienza el 20 de junio, con una concentración en torno del monolito Trópico de Capricornio. Más tarde se realizan la Ceremonia del Agua (“Yacuy”) y la de los Cerros (“Orgas”), y al caer la noche se enciende la primera fogata. Luego, a medianoche, los “abuelos” (ancianos sabios de la comunidad) destapan a la madre Pachamama, a la que se homenajea con música y bebidas calientes. A la mañana del día 21 se procede al bautismo (“chuscari”), una ceremonia aimara que consiste en bendecir a un feto de llama colocado sobre un aguayo multicolor. Luego se realiza una ofrenda al Tata Inti con chicha y hojas de coca.
La celebración suele reunir a miembros de los pueblos Kolla, Ava Guaraní, Tupi Guaraní, Qom, Mocovi, Mapuches, Comechingones, Diaguitas, Quilmes, Chorotes, Aymaras, Mayas, Uitotos, Piratapuyo, Pilagá y Charrúas, entre otras comunidades y organizaciones indígenas.
Huacalera es una población de poco más de 700 habitantes ubicada 83 kilómetros al norte de San Salvador de Jujuy. Además del monolito del Trópico de Capricornio, quienes se acerquen a la festividad del Inti Raymi pueden visitar la Capilla de la Inmaculada Concepción, construida en 1655. En su interior se destacan dos importantes obras de la escuela cusqueña, El Casamiento de la Virgen y El Bautismo de la Virgen, y un valioso retablo, creado por artistas andinos, que es el más antiguo de la zona. Otro sitio a visitar es la Posta de Huacalera, el establecimiento colonial más antiguo, donde aún perduran la escuela, construida en 1825, el molino de los jesuitas y el yacimiento arqueológico Pucará de Molla.